Entrevista a fondo a Margarita Morais
Martes, 15 de octubre de 2013
? Qué encontró en Roma en ese instituto con un nombre tan serio, la jovencita que eras entonces, con la carrera recién terminada?...o ?qué buscabas encontrar allí cuando te fuiste?. Qué te aportó?.
R.Buscaba, aprender más y mejor, como cualquier estudiante pero no podía imaginarme que el ambiente aquel fuera tan bonito e interesante. Recuerdo que el primer día que subí por la escalera de caracol del Pontificio Instituto de Música Sacra, estaba muy nerviosa y emocionada. Aquel edificio era enorme, con muros históricos, techos gigantes, biblioteca riquísima en manuscritos originales, pianos y órganos de verdad... Me pareció un lugar de ensueño. Los maestros eran famosos, dentro y fuera de Italia, personas con prestigio internacional y carreras muy sólidas: Bartolucci, Renzi, Aprea, Cardin, Viglianelli, Tosati… Sentí una enorme responsabilidad al poder estudiar con ellos. Eran profesores maravillosos, que me hacían desear ir a clase cada mañana. Siempre estaba contenta de aprender más y más. Ellos me querían y yo estaba prendada de sus conocimientos y buen trato. Toda esta situación me hizo vivir emocionada desde el primer día al último y me permitió estudiar con el máximo interés que podía.